El Museo de Bellas Artes organiza un ciclo con Silena Mamondes, Karla Buzo y la invitada chilena Paulina Olguín para profundizar en la dimensión social del tejido.
El ciclo de formación del Museo de Bellas Artes se interna en los sentidos profundos del tejido con la actividad “El textil, un instrumento cognitivo y vincular”. La propuesta, a cargo de Silena Mamondes, museóloga, conservadora y tejedora de historias, junto a la diseñadora y artista textil Karla Buzo, convoca a reflexionar sobre la trama como espacio de memoria, colectividad y resistencia. La cita contará además con la participación virtual de Paulina Olguín Espinoza, artista y docente del Taller de Arte Textil de la Universidad de Chile, quien aportará su mirada desde los procesos creativos y pedagógicos.
Durante el primer encuentro, el bloque 1 tendrá lugar el viernes 6 de septiembre desde las 15 hasta las 19:30. Allí, Mamondes abordará la relación íntima entre textil y cerámica desde la arqueología y la museología, mientras que Buzo explorará los comportamientos morfológicos del tejido y la naturaleza portante del vestir. La jornada cerrará con el conversatorio “Ejercicios de la reconstrucción emotiva. Huellas en los objetos a medio hacer”, a cargo de Olguín, que abrirá preguntas sobre el vínculo entre materialidad, afecto y memoria.
El segundo día del ciclo tendrá lugar con la inauguración prevista para las 17 horas, en un marco que busca no solo exponer obras, sino también habilitar un espacio de contemplación activa. Se trata de un laboratorio donde el textil deja de ser reducido a lo femenino para ser comprendido como una práctica social compartida, con raíces en el pastoreo, la vida comunitaria y la cosmovisión andina.
La propuesta invita a repensar el rol de la tejeduría, en un cruce entre arte contemporáneo, tradiciones colectivas y la tensión entre lo local y lo global. En esa trama, los hilos se convierten en un lenguaje que cuestiona la mirada colonial y abre un diálogo vivo entre lo individual, lo comunitario y lo artístico.